Hace un tiempo les recomendé que se compren un cuaderno y escriban sus sueños todas las mañanas. ¿Alguien empezó? Yo lo hago desde el 2009, aunque no todos los días porque tengo etapas en las que no me acuerdo de haber soñado nada. Ahora, hace varios meses que me despierto con el sueño completo en la cabeza y lo primero que hago es sentarme a escribirlo en mi cuaderno de los sueños. Trato de no esperar mucho porque a los pocos minutos me lo empiezo a olvidar y al final del día ya no me acuerdo de nada. No sé si tendrá que ver o no, pero en mi caso soy más consciente de mis sueños cuando hago trabajos creativos y cuando estoy conectada conmigo. Hablando de obsesiones, una de las mías son los sueños.

El ejercicio de hoy es escribir el último sueño que hayan tenido o que recuerden. Muchos de ustedes estarán pensando “pero yo no sueño nada” —me lo dijeron muchas veces— y puede que sea así, pero traten de hacer memoria: seguramente se acuerdan de algún sueño que tuvieron alguna vez, o suelen tener un sueño recurrente, así que empiecen por escribir acerca de eso. No importa si solamente se acuerdan de una imagen, de un fragmento muy corto o de una sensación. Pongan eso por escrito. Otra opción es que inventen un sueño y que lo escriban respetando las características de los sueños. En los míos, por ejemplo, paso de un escenario a otro sin explicaciones, aparecen personas en el cuerpo de otras (“era mi amiga tal en el cuerpo de mi amiga tal”), los objetos suelen ser importantes en la trama, hago cosas que me parecen muy normales pero que no haría estando despierta, sueño con lugares reales pero levemente alterados, me encuentro con gente que murió o con artistas que admiro. Cuando soñamos, el inconsciente no tiene censuras ni filtros, por eso no existe una trama o historia que esté bien o mal sino que todo es posible. Así que si no recuerdan ningún sueño o si quieren inventar alguno, tengan eso en cuenta: es una escritura muy libre, casi automática, en la que no tienen que preguntarse si lo que están escribiendo tiene sentido. Quizá este ejercicio sea el primer paso para empezar a completar sus cuadernos de sueños.

PD: resérvense las pesadillas para el ejercicio de mañana.
PD 2: “Tres”, un texto de Roberto Bolaño acerca de sueños y literatura.

Este disparador forma parte del proyecto mensual “30 días de escribirme”. Cada día durante 30 días compartiré una consigna o disparador corto para que escribas un texto en tu cuaderno, computadora o blog. La idea es que lo uses para entrar en calor la mano y generes el hábito de escribir todos los días. No es necesario empezar con grandes temas ni escribir durante horas. Estos ejercicios están pensados para hacerse entre 15 y 30 minutos, pero cada cual puede usar el tiempo que quiera. Podés ir viendo los disparadores de este proyecto acá. Si querés compartir tu texto en alguna red social, podés usar el hashtag #30díasdeescribirme. También podés publicarlo en los comentarios de este post.